¿Sabías
que las mujeres parpadean el doble de veces que los hombres?
Una de
las muchas diferencias entre hombres y mujeres es el movimiento facial.
Las
mujeres suelen hacer movimientos, como parpadear, inclinarla y asentir
con la cabeza, con más frecuencia que
los hombres. Y el parpadeo en
particular, puede ser dos veces más frecuente en las mujeres que en los hombres.
Parpadear
asegura la lubricación constante de los globos oculares y los protege de
objetos extraños. Las mujeres
parpadean con más frecuencia que los hombres,
esencialmente debido a los
niveles más altos de estrógeno en sus sistemas.
El estrógeno como una hormona
estimula la producción de lubricantes en todo el cuerpo, incluyendo el ojo.
Las mujeres que toman píldoras anticonceptivas que
tienen niveles elevados de estrógeno
parpadean incluso con más frecuencia, hasta un 32 por ciento más
a menudo, que otras mujeres.
Del mismo modo, las mujeres post-menopáusicas a
menudo sufren de "ojo seco".
Tal vez por
esto guiñar el ojo se percibe tan universalmente como un coqueteo,
el parpadeo
y la fertilidad están conectados hormonalmente.
Una de
las muchas diferencias entre hombres y mujeres es el movimiento facial.
Las
mujeres suelen hacer movimientos, como parpadear, inclinarla y asentir
con la cabeza, con más frecuencia que
los hombres. Y el parpadeo en
particular, puede ser dos veces más frecuente en las mujeres que en los hombres.
Parpadear
asegura la lubricación constante de los globos oculares y los protege de
objetos extraños. Las mujeres
parpadean con más frecuencia que los hombres,
esencialmente debido a los
niveles más altos de estrógeno en sus sistemas.
El estrógeno como una hormona
estimula la producción de lubricantes en todo el cuerpo, incluyendo el ojo.
Las mujeres que toman píldoras anticonceptivas que
tienen niveles elevados de estrógeno
parpadean incluso con más frecuencia, hasta un 32 por ciento más
a menudo, que otras mujeres.
Del mismo modo, las mujeres post-menopáusicas a
menudo sufren de "ojo seco".
Tal vez por
esto guiñar el ojo se percibe tan universalmente como un coqueteo,
el parpadeo
y la fertilidad están conectados hormonalmente.